Estimada Comunidad Universitaria:

Prontos a iniciar nuestro nuevo año académico y a propósito del proceso reflexivo que el contexto social y sanitario nos ha hecho experimentar, la Universidad de Aconcagua ha observado en profundidad el trabajo realizado hasta ahora y cómo queremos desarrollar nuestro compromiso social de formación frente a lo que declara en su nueva Misión, Visión y Propósitos Institucionales, que están más en sintonía con la trayectoria próxima a experimentar.

Desde ahí, se ha generado un espacio para una hoja de ruta que pretende fortalecer las áreas existentes, pero, además aprendiendo de nuestra particular historia Universitaria.

Es así que uno de los elementos que rediseñamos fue el Modelo Educativo de nuestra Universidad, mapa de la principal responsabilidad de las instituciones de Educación Superior y que está siendo reflexionado, socializado y apropiado por todos nosotros como Comunidad UAC.

Desde hace 32 años hemos entregado herramientas que abren oportunidades a jóvenes estudiantes, así como también a quienes se encuentran insertos en el mundo laboral y que buscan perfeccionarse profesionalmente, o bien, ya en la etapa adulta, inician el proceso de formación profesional. Así entonces, nuestro modelo educativo apunta a entregar las herramientas necesarias que abrirán oportunidades, serán la llave para alcanzar anhelos que sólo la formación académica les puede entregar. Este es el compromiso que asumimos y que refleja la seriedad con la cual hoy nos encontramos como Institución para asumir el desafío de caminar juntos hacia un proyecto sustentable, con oferta de calidad, formadora de titulados y graduados cuyos perfiles de egreso son pertinentes al desarrollo del país.

Un cordial saludo.